Toriformula

Dragón Ball, procediendo de la mano del maestro Akira Toriyama, DB como animé a generado desde su inicio un cambio y todo un revuelo mediático que a enaltecido a esta famosa saga, como una de las más grandes de todos los tiempos y a veces llamado, "El padre del Shonnen".

Todos sin excepción, siendo de nuestro disfrute o no, hemos tenido el mínimo roce con esta serie de antaño, contando dibujos y una escencia tan única como irrepetible, haciendo que todos sin excepción por lo menos tengan el privilegio de reconocer a el tan icónico protagonista del anime, Son Goku. Un personaje sin igual del que proceden distintas sagas y momentos sumamente espectaculares, del que tramas y personajes nuevos han dado a luz para volverse tan buenos e inolvidables como la misma serie.
Pocas sagas pueden presumir de tal nivel mediático y resguardo en la historia, como memoria de los espectadores. ¿Cómo es que lo logra? Y sobre todo ¿Aquella atención mediática exenta al animé de errores? Por qué en muchas cabezas no puede caber el mero hecho de su mero desconocimiento o disgusto, un producto como tal, tenga los ojos de las mayorías en él, ya que no es del todo correcto diferir que hay cosas en este universo que podrían ser mejor, sin embargo, hay un denotar bastante peculiar en la preferencia de los espectadores acérrimos de esta serie, dónde se procede con este análisis.

No es para mentir que no siempre los producto mediáticos poseen la calidad que un artistsa, o conocedor mamador quiera acoger o por lo menos denominar cómo decente. Pero en este argumento no citamos perspectivas referentes únicamente a la calidad, si no también retomando el labor sociológico y mediático que a generado una "desafortunada" costumbre en los fans de Dragon Ball. ¿Que es lo que me hace decir esto? Simple, siendo fan o un poco conocedor de este animé, no es para hacernos de la vista gorda sobre el hecho de que, "El padre del Shonnen" padece de un pequeño gran problema, la monotonía.
Toriyama es un genio de sus tiempos y un innovador del entretenimiento, cosa absolutamente irrefutable, pero en esa misma innovación, nos encontramos con una fórmula de para bien o para mal termina siendo la jugada fácil en la que se enajena con alta facilidad al espectador, contando tramas mediante capítulos extensos con una batalla espectante en la que se repiten giros argumentales, que si bien. No es para mentir que eso superficialmente es del agrado de las masas, pero ante el público exigente como los "promedios" ¿Es realmente esto lo que merece el público? Si y no.

¿Por qué un "Si y no"? Fácil, yo cómo buen mamador, puedo darte un simple y llano "No", por mera exigencia y una falta de conformismo, pero de misma manera puedo darte un "Si" ya que con todo el orgullo de un Príncipe Saiyajin, me tienes ante la pantalla esperando algo nuevo de esta icónica saga. Lo que quiero dar a entender es que lejos de juzgar por estándares de calidad, nos demos el tiempo de verdaderamente disfrutar algo que nos llene y nos haga magnanimos, no se trata de ser ciego de los medios, si no ser lo suficientemente maduros e inteligentes para permanecer y abrazar lo que en verdad nos gusta. Nada es más merecedor en nosotros que algo que a sido digno de nuestro querer y fanatismo.


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